El beso de la mujer sin sueño
Llego y le tomo la cara entre sus manos,
Súbitamente le beso
<¿y eso a que viene?>
-no viene a nada-
Le contesta.
Todos los días ella le sonreía, lo miraba fijamente a los ojos con la cara volteando hacia el piso, su miradita de complicidad “le decían muchas cosas”.
Ella pensaba que podría haber algo: caricias lascivas tal vez.
El pensaba que podría haber algo más: una chica con la cual compartir.
Ella pensaba que podría haber algo más: caricias, besos, paseos sin nada que decir. Sexo, quizá.
Ella lo miraba cada tarde, le sonreía, se inmiscuía en los “jueguitos de manos”.
Ella sabe que no le ama, El, quien sabe que sabe.
Ella va a besarlo, tomar lo que pueda, gozar y largarse
Y
Si El no hace lo mismo… ese ya es su problema.
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